La respuesta es no. La parálisis del sueño, aunque desagradable, no es peligrosa. Rara vez dura más de unos minutos y no deja secuelas. Una vez que el cerebro recupera el control total del cuerpo, todo vuelve a la normalidad.
Algunas personas lo experimentan sólo una vez en la vida, otras con más frecuencia, especialmente durante periodos de estrés, fatiga o alteraciones del sueño.
¿Qué debes hacer si esto te sucede?
Si esto te sucede, lo más importante es mantener la calma (aunque no sea fácil). Intenta:
- Respira lenta y profundamente.
- Mover un dedo de la mano o del pie: a veces eso es suficiente para “despertar” el cuerpo.
- Permanezca acostado y vuelva a dormir una vez que haya pasado la sensación.
Y sobre todo, recuerda: no estás solo. Este fenómeno es más común de lo que crees, e incluso ha inspirado leyendas, creencias... y películas.
En resumen
La parálisis del sueño puede parecer alarmante, pero es natural e inofensiva. Es una especie de transición entre el sueño y la realidad, una ventana a los misterios de nuestra mente. La próxima vez que te ocurra, recuerda: no es un fantasma ni un hechizo, solo tu cerebro te está gastando una mala pasada.
Y a veces, saber que todo tiene una explicación ya es una manera de recuperar la calma… y quizás hasta el sueño.